Mi suegro me manosea estando embarazada y cogimos en mi cuarentena
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Mi nombre es Yamileth y hace 3 años me case con Fabricio por el civil y me fui a vivir a la casa de su familia. Yo tenia 18 años y el 21, no teníamos a donde irnos a vivir, ni trabajo y la mejor opción era quedarnos en la casa de los papás de Fabricio. Yo llegue con 4 meses de embarazo y me fue muy difícil acostumbrarme a vivir con su familia aun cuando ya los conocía de los 2 años que fuimos novios. Su mamá su dos hermanas y su papá siempre fueron muy lindos conmigo pero aun así es difícil adaptarse a las costumbres de otra familia.
Fabricio no tardo en conseguir un trabajo y a mi no me dejaron ni siquiera que buscara, decían que después de que naciera mi bebé ya tendría tiempo de conseguir empleo. Así que me quedaba a ayudar en las labores de la casa mientras Fabricio trabajaba. El papá de Fabricio se llama Mauro y casi desde que llegue comenzó a chulearme incluso delante de su familia. Todos me decían que no le hiciera caso porque así era el de bromista con todas las personas. Así que yo lo tomaba como simples bromas de parte de Mauro.
Coma Irma la mamá de Fabricio se dedica a vender cosas por catalogo, se salía muy temprano a visitar a sus clientas y varias veces me quedaba a solas con Mauro. Las bromas y comentarios que Mauro hacia mi frente a su familia subían mucho de tono cuando estábamos solos y a veces me ponía muy nerviosa. Frente a todos solo decía que estaba muy chula y que su hijo si supo escogerle una buena nuera. Pero a solas eran comentarios como: “Mamacita, ¿Todo eso se come el cabron del Fabricio?” o “Mi chamaco no ha de saber que hacer con todo eso, verdad mija”.
Creo que la primera vez que Mauro me manoseo yo tenia ya como 6 meses de embarazo, aunque casi no se me notaba, supongo que porque soy delgada, pero las tetas me habían crecido bastante mas y de por si soy algo tetona. Recuerdo que esa mañana igual que muchas otras, Irma se había ido a cobrar a sus clientas y Mauro estaba por irse a su trabajo. Yo le estaba sirviendo el desayuno y el estaba sentado cuando me jalo de la cintura y puso su cara entre mis tetas mientras me decía que estaban muy ricas. Me asusto mucho que hiciera eso y me quite lo mas rápido que pude pero me dio pena decirle algo. Obviamente tampoco le dije nada a nadie porque no quería causar un problema entre Fabricio y su familia.
Durante varios días trataba de estar lo mas lejos de Mauro y evitaba quedarme a solas con el, incluso me ofrecía a acompañar a doña Irma solo para no quedarme. Pero era imposible evitarlo todo el tiempo y la siguiente vez que me agarro a solas, de un jalón me saco las tetas de la playera de tirantes que llevaba y casi me la rompe. Puso cada una de sus manos en una de mis tetas y las apretó hasta sacarme un poco de leche. Yo le decía que no lo hiciera pero no podía quitarme porque me tenia contra la pared.
Después de la segunda vez ya no se detuvo. Mauro aprovechaba cada descuido de su familia para agarrar mis tetas o mi culo. Yo tenia miedo de quedarme a solas con el o de que se dieran cuenta, pero no podía hacer nada sin hacer un escandalo. Para esos momentos mi panza ya se veía bastante y ya no me sentía cómoda viviendo en la casa de mis suegros. Cada vez sentía mas que Mauro era muy mala persona y que si no hacia algo, tarde o temprano me iba a terminar violando.
Un día que Mauro intento acariciar mi chocho me arme de valor y le dije que si no dejaba de hacerlo le diría a Fabricio y su esposa. Mauro se rio de mi y me dijo que si decía algo tenia que comprobarlo y que entonces yo y Fabricio nos tendríamos que ir de su casa y arreglárnosla solos. Creo que todo fue peor desde que lo amenace, porque como obviamente no hice nada, un par de días después se metió a la recamara en cuanto doña Irma se fue.
Hasta ese día solo me manoseaba y me decía que le encantaba y que estaba bien rica, pero nunca me había hecho otra cosa. Cuando se metió a la recamara yo me estaba terminando de vestir y se puso atrás de mi frotando su verga contra mis nalgas. Aunque los dos teníamos ropa puede sentir su bulto duro repegado a mi culo y me asuste. Pensé que iba a violarme y me preocupaba mi bebé. Ya tenia unos 7 meses y ni con Fabricio cogía porque me molestaba un poco cuando me la metía, entonces me daba miedo que Mauro quisiera cogerme ala fuerza.
Por suerte no fue así, Mauro me dijo mientras se repegaba a mi culo que ya lo tenia bien caliente y que no lo dejara así y que al menos le diera unas mamadas. Por miedo o por nervios pero le dije que si pero solo seria esa vez, yo pensando en que al menos no me quisiera coger. Mauro se saco la verga y me quede impresionada de ver aquello. Fabricio había sido el único hombre con el que yo había estado, no tenia otra forma de comparar su verga mas que con películas porno que a veces veíamos. Yo pensaba que una verga tan grande y gorda como la de los artistas porno solo eran posibles en películas y que seguro era porque algo se hacían para tenerla así.
No es que Fabricio la tuviera chica, pero cuando vi la de Mauro me dejo impactada lo gorda que se veía. La de Fabricio es casi del tamaño de mi mano abierta, pero la de Mauro me llegaba hasta poco mas de la muñeca. Además era mas gorda y se le veían venas por todos lados. No voy a negar que se me hizo muy bonita, hasta parecía que era falsa de tan bonita que la tiene. Cuando me la metí a la boca apenas me cabía la punta y un poco mas.
van a pensar que soy muy puta, pero me puso bien cachonda chuparle la verga a Mauro, sentir su verga bien dura en mi boca me excito muchísimo. Yo me había puesto de rodillas frente a el mientras estaba de pie y me tomo de la cabeza y por momentos me ahogaba porque me empujaba para que me entrara mas a la boca. Aunque me daban nauseas, no era porque no me gustara, mas bien era porque no podía respirar con su verga en mi boca. Aun así me gusto mucho chuparle la verga, ni a Fabricio se la había chupado de esa forma y cuando se vino trate de quitarme y no me dejo. Esa fue la primera vez que me trague el semen de un hombre y no fue el de mi marido si no el de mi suegro.
Yo no le dije a Mauro que me había puesto cachonda, cuando el se vino solo se volvió a guardar la verga y se salió de la recamara sin decirme nada. Nunca me había excitado de chuparle la verga a Fabricio, de hecho si podía evitar chupársela pues lo hacia. Pero la verga de Mauro me encanto desde que la vi y chuparla me provoco cosas que nunca había sentido.
Los días pasaron y Mauro no me volvió a pedir que se la mamara, solo me seguía manoseando y de vez en cuando se la sacaba para que yo lo masturbara. Me daba pena ser yo la que se la chupara sin que el me lo pidiera, pero ya los manoseos me gustaban y ya me ponía cachonda de inmediato cuando sentía sus manos.
Por fin me alivie y nació mi hija, todos en la casa de Fabricio me atendían como reina y a mi nena la querían muchísimo. Los primeros días que volví a estar a solas con Mauro el no me toco para nada, siempre estaba con mi hija y creo que el sentía pena de tocarme como antes estando la niña. Como a la semana de que nació mi hija, le estaba calentando el biberón cuando salió doña Irma, Mauro se me acerco y me comenzó a besar en la boca.
Es difícil creer que después de meses de manosearme y de que yo se la chupe, nunca me había intentado besar. Francamente no se quien estaba con mas urgencia, si el o yo. Tenia varias semanas que no dejaba de pensar en la verga de Mauro y tenia muchas ganas de tocar y chuparla. Los besos de Mauro me gustaron mucho y me puso bien cachonda, esta vez fui yo la que me arrodille por mi cuenta y le saque la verga para mimársela ahí mismo en la cocina.
Nuevamente su verga me hizo alucinar, es tan deliciosa y esta tan bonita que aunque nunca me habían gustado los hombres mayores, Mauro me encanta. El no es un hombre guapo, es mas guapo Fabricio, pero tiene un cuerpo rudo, duro, velludo y con unas manos enormes que me vuelven loca. Mientras Fabricio aunque es mas guapo, es delgado, apenas con unos pocos vellos en el pecho y las piernas, pero ahora lo siento como frágil, como delicado con manos demasiado suaves.
Yo pensé que iba a aguantar la cuarentena y al terminarla iba coger con Mauro, pero no aguantamos. Apenas tenia como dos semanas de aliviada y yo misma le pedí que me la metiera solo un poquito. Estábamos en la sala y me acostó en el sillón. Me metió solo la punta y aunque me molesto un poco no fue tanto como yo pensaba. Entre los besos y las caricias le pedí que me la metiera toda y comenzó a metérmela pero suavemente. A pesar de que su verga es mas grande que la de Fabricio, fue tan delicado que cuando sentí ya la tenia toda adentro de mi.
Esa vez lo hizo super suave, no fue nada rudo y aunque se excito mucho pudo contenerse de hacérmelo duro. Así suavemente se vino dentro de mi y fue una de las cogidas mas ricas que he sentido sin que me lo hagan duro. A partir de ese momento cada que nos quedamos solos aprovechamos y me da unas cogidas deliciosas. Nada que ver con Fabricio que aunque lo amo, nunca me ha hecho sentir lo mismo que su papá me hace sentir.
Además es super cachondo que cuando escuchamos que doña Irma se sale de la casa yo corro a nuestro lugar favorito, me abro de piernas y Mauro llega directamente a clavarme su verga. hemos cogido por toda la casa, pero a los dos nos gusta usar un escritorio donde me siento, subo mis pies abriendo mis piernas y Mauro se la saca para metérmela sin que tenga que quitarme nada de ropa. No se porque pero ahí es donde me hace venir mas rápido y me encanta venirme por lo menos dos veces cogiendo con el. También me gusta cuando me coge de pie y el estando atrás de mi, pero tardo mas tiempo de venirme de esa forma.
A lo mejor van a decir que soy muy puta, pero solo he tenido sexo con 3 hombres. Mi marido Fabricio, mi suegro Mauro y hace poco con un amigo de Fabricio que me encanta desde que éramos novios. No creo ser tan puta, es solo que Mauro es un hombre en toda la extensión de la palabra y me provoca cosas que ningún otro me provoca. Mas que de el como hombre, estoy enamorada, alucinada y obsesionada con su hermosa y deliciosa vergota. Solo espero que cuando Fabricio tenga la edad de su papá sea o se sienta por lo menos como el.
No voy a negar que durante algún tiempo me sentí mal por terminar de amante de mi suegro. Pero a veces Fabricio no tiene ganas o llega cansado y no quiere coger. Mientras Mauro siempre tiene ganas, no importa si esta cansado o no, siempre tiene ganas de cogerme. Con Fabricio a veces se la tengo que chupar hasta que se le para, mientras Mauro a penas me toca o yo a el y ya la tiene bien dura y sabrosa. Fabricio a veces se viene bien rápido y ya no puede con una segunda cogida, mientras con Mauro aunque se venga, si aun tenemos chance no deja de cogerme y se puede venir dos o hasta tres veces seguidas.
En tres años si hemos estado a punto de que nos atrapen pero por suerte no ha pasado, si me da miedo pero también me excita mucho. He leído varias historias aquí de chicas que también se metieron con su suegro y eso me consuela de que no soy la única. Al menos el mío es un hombre que me prende como ninguno, que me a enseñado a disfrutar de muchas formas y que esta muy por arriba en experiencia que su hijo. Si por mi fuera me quedaría a vivir en casa de mis suegro para siempre, pero ya estamos en planes de irnos a una casa que va a sacar Fabricio por Infonavit. No me hace nada de gracia pero se que algún día nos tenemos que salir. No quisiera dejar de tener a la mano a Mauro y conformarme con vernos de vez en cuando.
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Cuenta como estuvo que te metiste con el amigo de tu esposo porfavor
A mi preciosa hija Nicoll, me la vengo cachando y la atiendo mejor que su marido Y Nicoll me dice que yo soy su verdadero marido.