Chavita de 18 añitos me pide que le pegue cuando cogemos yo tengo 46
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Hola, mi nombre es Santiago y soy dueño de una tienda en una colonia popular. Quiero escribir sobre una chamaquita que me ofreció pagarme con sexo y realmente me tiene alucinando. Yo tengo 46 años y aunque estoy casado, muchas veces he tenido algunas amantes pero todas han sido de mi edad o menores que yo por algunos pocos años. El caso con Julia es que ella apenas tiene 18 años pero ni juntando la experiencia de todas las mujeres que he conocido se acercan a lo que ella ha vivido. A pesar de su edad es madre soltera, su niño cumplió 3 años en diciembre, Julia vive con sus papás y sigue estudiando, pues por lo que se, están criando al nieto como si fuera su hijo.
Antes de conocer mejor a Julia cuando iba cargando a su hijo y con su uniforme de la escuela antes de la pandemia, pensaba que era una lástima que una chiquilla tan linda como ella echara a perder su vida tan jovencita. Realmente se veía como cualquier chamaca de esa edad que va a la escuela, incluso hasta más inocente que muchas solo con la única diferencia que ya tenía un hijo. Pero cuando lean mas mi relato posiblemente lleguen a pensar lo mismo que yo he pensado respecto a que tal vez Julia tenga realmente algo mal en la cabeza.
Todo comenzó hace casi un año cuando Julia pasaba a la tienda ocasionalmente y me pedía fiada alguna mercancía que por lo regular eran tontearías como sabritas, refrescos, dulces y muy rara vez era algo para su niño. Pasaba el tiempo y no me pagaba, pero me daba pena cobrarle porque no sabía realmente su situación en su casa teniendo la responsabilidad en mayor o menor medida de ser madre. Por unos meses deje que su deuda siguiera creciendo y hasta oculte su deuda de mi esposa para que no me preguntara porque no le había cobrado. No es que mi mujer esté metida en el negocio, pero ella me lleva las cuentas. Pero llegó el momento que debía casi $3000 en cosas y tuve que cobrarle.
Entonces un día poco después de que le cobre llego a la tienda y en lugar de pedirme cosas se puso a platicar conmigo y eso ya de por si era raro. Aunque si hablamos de su deuda y me prometió pues sus papas le darían un dinero y de ahí tomaría para pagarme una parte, casi todo eran preguntas de ella sobre mi y mi familia. Me di cuenta que me estaba coqueteando cuando no había nadie mas en la tienda y por algunos comentarios lo confirme. Pero también pensé que era una estupidez pensar eso porque ¿Qué podría ver una chamaquita de 18 años en un viejo como yo?
En algún momento me pregunto si yo había sido infiel a mi esposa alguna vez y le respondí que si, que alguna vez había andado con alguien más. Entonces ella directamente y sin andarse por las ramas me dijo que entonces no me molestaría su propuesta. Cuando le pregunte cual propuesta me dijo que ella era muy, pero muy caliente y que le encantaba coger, que si yo le perdonaba la deuda que podría ser mi amante y que podría coger con ella cuando se me antojará siempre que de vez en cuando le siguiera dando algunas cosas de la tienda. Mi primera reacción fue decirle que no estaba bien porque yo ya estaba viejo y que ella era todavía una niña. Entonces ella se asomo hacia la calle para ver que no viniera alguien y se levantó la falda y se bajó un poco el calzón para enseñarme un poco su pepita con apenas unos pocos pelos. Mientras me enseñaba me preguntaba si no se me antojaba y me decía que ya era mayor de edad y que de todas formas había muchos que si la aprovechaban.
Es una sensación un poco rara que una chamaquita que en teoría es inexperta te hable tu siendo un hombre maduro de una forma tan directa ofreciéndote sexo con ella. Francamente me puse un poco nervioso y le dije que se estuviera quieta porque podía llegar algún cliente, entonces ella se acercó al mostrador y me dijo que era muy miedoso. Le dije que era muy linda y que era claro que me me gustaba pero que no queria problemas con su familia o con algún novio. Julia mucho más seria me dijo que no la conocía pero novios tenía muchos y no le decían nada y que en su casa ni se enteraban de lo que ella hacía. También me dijo que le encantaba coger y que sabía hacer muchas cosas que seguro me iban a gustar y que estaba segura había hecho mas cosas que yo en toda mi vida. Que ella solo pedía que no le cobrara lo que debía y que le siguiera fiando. Lo que significaba regalarle las chucherías que siempre pedía y dijo que me iba a gustar tanto que después iba a querer regalarle toda la tienda.
Comenzaron a llegar algunos clientes y ya no seguimos platicando, se despidió de mi diciéndome que lo pensara y mañana le dijera. Justo una de las clientes que estaba en la tienda dijo en cuanto se fue Julia, “Hay don Santi, no le vaya a fiar a esa niña, es bien loca y no tarda en irse con alguno de la bola de muchachillos con los que anda y ya no le va a pagar”. Toda esa tarde y toda la noche me la pase pensando qué hacer porque aunque era una tentación muy grande, no queria problemas. Amantes he tenido varias pero ninguna tan joven como Julia y por otro lado yo sabía que ella lo hacía a cambio de ahorrarse dinero. Además, aunque ella ya tiene 18 años y es mamá realmente parece una niña y más si la ponen a mi lado.
Al día siguiente me sentía como adolescente cuando se le va a declarar a una chica por lo nervioso, yo ya sabía que ella por lo regular pasaba a mi tienda cerca del medió día. Me había dicho a mi mismo que solo un par de veces por lo menos para desquitar lo que me debía y que después le diría que ya mejor no. Pasado de las 12 la vi llegar pero yo estaba atendiendo y ella tomo un refresco y se esperó. Cuando el señor que estaba salió de mi tienda, Julia me pregunto que si ya tenía nuevo novio o si iba a tener que conseguir el dinero con alguien que si quisiera aprovecharla. Le respondí que siempre y cuando fuera sumamente discreta le cancelaría su cuenta por estar juntos un par de veces. Julia de inmediato me dijo que cerrara un rato la tienda para que no nos molestaran, pero yo nunca cierro ni para comer, así que le dije que mejor otro día que ella pudiera por la mañana o por la tarde.
Parecía que le hablaba a la pared, Julia se asomo a la calle y se metió de mi lado del mostrador mientras me decía que no se iba a ir con las ganas. Se puso frente a mi y sin dudarlo se puso de puntas y me jalo de la nuca para que la besara en la boca mientras me decía que ya era yo su novio. Creo que fue el momento que más nervioso estuve de que alguien entrara y me viera besando a Julia, pero aun así la bese por unos segundos. Ya no recuerdo ni cuando fue la última vez que le había dado un primer beso a una mujer y que ella usara tanto su lengua, pero la verga se me puso durísima de inmediato. Cuando dejamos de besarnos Julia se puso de rodillas y me comenzó a desabrochar el pantalón pero yo le dije que en ese momento no. Ella me miró desde abajo mientras me decía que si no iba a dejar que lo conociera aunque sea un ratito.
En eso estábamos cuando entró un grupo de 3 chicos a la tienda y Julia se sentó completamente en el piso para que no la vieran mientras yo como pude me subí el cierre y medio abroche mi cinturón. Lo bueno es que mi mostrador es cerrado y no se ve lo que está de mi lado, pero me sentí bien nervioso. Apenas se fueron no me queria acercar a Julia pero ella se levanto y me jalo hacia donde esta la parte del mostrador que menos se alcanza a ver desde afuera y nuevamente me comenzó a desabrochar el pantalón. Le dije que solo me bajaría el cierre y ella aceptó, entonces me saque la verga y ella sin pensarlo se la metió a la boca para comenzar a darme una mamadas sumamente sabrosas.
Increíble que supiera mamar la verga de tal forma, pero es que en realidad parecía que le encantaba hacerlo y después de 2 o 3 chupadas que me dio yo ya no queria que dejara de hacerlo. Por suerte ya ningún cliente entró por un buen rato, estaba disfrutando mucho mirando hacia abajo y ver como se devoraba mi verga como si fuera lo mas sabroso que había probado. Cuando sentí que me venia le dije que parara porque me iba a venir pero me ignoro por completo y trate de quitarme. Literalmente la tome de la cabeza con mis dos manos y la trate de echar hacia atrás para sacar mi verga de su boca pero no me dejo.
No aguante mas y comencé a venirme de una forma que tenia mucho que no lo hacia y Julia no dejaba de succionar como quisiera dejarme completamente seco. Pude ver que algo de mi esperma salió de su boca y le escurrió por la muñeca de una de sus manos, la chamaca aun de rodillas abrió la boca para que yo viera que tenia toda mi leche. Esperaba que la escupiera, pero se la trago toda y todavía con su lengua limpio lo que le escurrió por la mano y muñeca. Antes de levantarse en un tono bastante inocente pero claramente fingido me dijo: “y tu que me querías mandar a mi casita sin mi lechita… que malo eres… ¿te gusto?”.
Claro que me había gustado, por mucho fue la mejor mamada que me habían dado, increíble que fuera de una chamaquita de 18 años. Nuevamente me sentí un poco nervioso pero mucho menos que antes, le dije que ya se fuera para que no la vieran que estaba mucho tiempo en la tienda sola conmigo. Julia me dijo que era un miedoso, pero que en la noche regresaba cuando cerrara y le dije que solo si podía porque yo cerraba hasta las 10pm. Ya no dijo mas solo un “ok” y se fue de la tienda dejándome bien deslechado y acomodando mi ropa. Realmente me dejo impactado por lo cachonda que se vio mientras me la chupaba pero mucho mas de que se tragara mi leche como si nada.
Se me hizo eterna esa tarde pero finalmente baje la cortina, paso como media hora y por unos momentos pensé que Julia ya no iría esa noche pero escuche que tocaron la cortina. Abrí la puerta y era Julia, antes de entrar se puso de puntas para darme un beso en la boca y se lo di pero le dije que se metiera rápido para que no nos vieran y me volvió a decir “miedoso”. Ya adentro nuevamente nos besamos, yo solo la tenia de la cintura y ella me tenia del cuello. Entonces me dijo que no mordía y que la podía agarrar por donde quisiera pues que para eso nos hicimos novios. Francamente no estaba acostumbrado a que una chica fuera tan directa pues con las que he andado las primeras veces siempre es todo un poco mas lento para irnos conociendo.
Seguimos besándonos pero ya la estaba manoseando, mi mano levanto su falda y le estaba acariciando sus ricas nalguitas mientras le preguntaba que queria que hiciéramos. Yo pregunte mas que nada porque es muy joven y no sabia si queria que la calentara mas antes de coger, pero ella me respondió. “Que me cojas y me hagas gritar como loca de tanta verga”. Seguimos con los besos y ella comenzó a desabrochar mi pantalón hasta sacar mi verga. Me comenzó a masturbar y me dijo que le metiera los dedos así que agache un poco para alcanzar su pepa y no encontré ningún calzón de por medio pues pude sentir directamente sus pelitos todos mojados. Le metí un dedo que le entro fácilmente y lo comencé a mover mientras ella subía y bajaba su cadera pero sin dejar de masturbarme. No paso mucho cuando me pidió que lo hiciera mas duro y busque meterle mis dos dedos de en medio y cuando los tuvo adentro me decía “Mas duro, mas duro, mételos mas sin miedo”. Julia no dejaba de moverse de arriba a bajo y con una mano sostenía mi verga y con la otra empujaba la mano con la que yo la estaba masturbando.
Estuvimos así por unos minutos y ella me dijo que ya me la cogiera mientras se empinaba sobre los costales de alimento para mascotas abriendo un poco sus piernas y levantando su culito mientras se acariciaba la pepa. Yo iba rumbo al mostrador a buscar un paquete de condones y ella me pregunto a donde iba, cuando le dije que por condones me dijo “Cógeme así, no me vas a embarazar”. Me regrese y me puse atrás de ella, aunque como es chaparrita me tuve que agachar mucho con las piernas bien abiertas para poder acomodarle mi verga. Apenas se la había metido cuando me pidió que me la cogiera duro porque así le gustaba a ella y estaba tan cachondo que ya no sentía ni pena ni remordimiento por la diferencia de edades. Eran tan duros los empujones de verga que le estaba dando que ella se fue haciendo hacia delante hasta que quedo sobre un par de costales levantando el culo pero con las manos hasta el piso.
Julia no paraba de pedirme que le diera mas duro y yo empujaba con todas mis fuerzas hasta que chocaban mis piernas con sus nalgas y se escuchaban como aplausos. Algo que pude notar cuando se empino mas, fueron varios moretones en la parte de atrás de sus muslos y nalgas, pero estaba tan caliente que deje de ponerles atención. Los gemidos de Julia eran cada vez mas fuertes, fácilmente los pudieron escuchar desde afuera de la tienda, pero en esos momentos no me importaba. Cuando mas caliente me puse fue cuando Julia me comenzó a decir: “Así papi, dame mucha verga papi… ¡me encanta la verga!”
Estaba en el punto mas alto de mi excitación, pero entonces Julia me comenzó a pedir que le pegara y que lo hiciera muy duro, así que le di algunas nalgadas. Lo cachondo se me bajo un poco cuando ella me dijo que le pegara mas duro y con el puño cerrado, lo único que se me ocurrió decir es en donde queria que le pegara. Mientras Julia me decía que donde quisiera pero que sentía mas rico en las piernas o las costillas, pensé que no fuera a ser que después dijera que la había violado y me desconcentre mucho. Creo que Julia se dio cuenta porque me dijo: “Ándale, no pasa nada, no me duele, al contrario, me hace sentir mas rico”. Pues ni hablar, algo tímidamente le di un par de puñetazos en las nalgas y julia me decía que lo hiciera mas duro.
Poco a poco me fui relajando y a poner cachondo de nuevo, así que mientras me la seguía cogiendo le seguí dando algunos madrazos en las nalgas y muslos. Francamente no le pegaba con todas mis fuerzas pero si eran golpes que a cualquier mujer le dolerían y se quejaría, pero en verdad que Julia se ponía cachonda cada que le pegaba. Seguimos cogiendo y le dije a Julia que se pusiera sobre mi después de sentarme en los costales del alimento. Ella se me monto y estando de frente comenzamos a besarnos y entre los besos me dijo que no tuviera miedo de pegarle, que sentía muy rico y que le excitaba mucho. Me pidió que le pegara en las costillas y le di un golpe, ella se comenzó a mover mas rico sobre mi verga y me pidió que siguiera. Le seguí golpeando las costillas de un lado y del otro y ella realmente se ensartaba mas y mas duro mientras gemía.
Yo ya no aguantaba mas y le dije que me venia, justo cuando le dije eso me pidió que le diera una cachetada y lo hice no muy duro, entonces me dijo que era un miedoso y me dijo que le diera con fuerza. la segunda cachetada que le di fue bastante fuerte y hasta la mano me ardió y se le marco la cara roja. Aun así no dejaba de moverse sobre mi y me hizo venirme dentro de ella. Se quedo montada en mi aunque ya no se movía y me pregunto si me había gustado. Fui muy franco y le dije que nunca había golpeado a una mujer y menos mientras cogíamos, que era muy raro para mi. Julia se sonrió y me dijo que a ella le gusta mucho que le peguen mientras se la cogen y que todos sus novios lo hacían.
Por primera vez platique con ella y le pregunte si tenia novio y me respondió que si, que tenia 5 y conmigo eran 6. Le pregunte que si con todos cogía y me dijo que si no, entonces para que andaba con ellos. También le pregunte que si eran de su edad y me dijo que solo uno, los demás eran mas grandes pero que yo era el mayor de todos. También le pregunte si alguno era el papa de su hijo y me dijo que no, que ni siquiera esta segura de quien es el papá y me comenzó a contar mas cosas sobre ella que yo no tenia ni idea.
Me platico de como fue su primera vez y sobre que desde el principio le encanto coger pero que sus primeros novios le tenían miedo porque ella queria hacerlo todo el tiempo en todos lados. Entonces, antes de quedar embarazada andaba cogiendo con 3 chicos pero que a veces también cogía con otros que se ligaba y fue cuando salió embarazada. Cuando le pregunte que entonces ahorita cogía con 6 (incluido yo), se rio mucho y me dijo que con mas, que 6 eran sus novios, pero que cuando había oportunidad se iba a coger con alguien mas. Le pregunte que si entonces cogía con uno cada día y con una risa burlona me dijo que si por ella fuera cogería con todos todos los días. Pero que si, mas o menos, pues a veces cogía con alguno en la mañana y si se podía con otro por la tarde o noche, pero que los fines de semana a veces cogía hasta con 4 o 5 en el mismo día.
Yo nunca hubiera imaginado que una chamaca de esa edad y tan inocente que se ve, anduviera de puta a ese nivel. Me dio un poco de cosa que había cogido sin condón con ella y no queria contagiarle algo a mi esposa. Así que le pregunte si usaba condón con todos y me dijo que no le gustaba con condón pero que cuando no estaba tomando las pastillas anticonceptivas que le dieron, pues que si. Entonces también le pregunte si se tragaba el semen de algunos. Directamente me contesto que siempre que podía, porque eso le encantaba y mas ver la cara que ponían cuando los exprimía.
Platicar con julia no era como platicar con una chiquilla de 18 años, mas bien era como platicar con una prostituta de carrera larga. Y no soy espantado, pero en realidad los chamacos que hoy en día no piensan las cosas y menos en su futuro. Trate de darle el consejo de que mejor se cuidara y me dijo que si de algo se iba a morir, pues mínimo queria disfrutarlo. Después me dijo que no me portara como su abuelo y que mejor lo disfrutáramos.
Cuando le pregunte sobre que decía su familia, me conto que al principio la regañaban mucho pero que después de su bebé ya no le dicen nada, solo que se cuide para no volver a embarazarse. Pero lo mas cabron fue cuando le pregunte como se dio cuenta que le gustaba que le pegaran mientras se la cogían. Me dice que en una de las veces que se ligo a dos chicos en la calle, se fue a coger con ellos y uno era muy brusco y le reclamo. Entonces en lugar de calmarse le empezó a pegar mientras su amigo la sujetaba para que no se moviera y cada vez que se queria quitar, el que se la cogía le pegaba con el puño cerrado en donde callera. Incluso dice que se puso a llorar, pero se fue excitando poco a poco hasta que le comenzó a gustar. Después cuando cogía con un novio, ella le pidió que le pegara y así fue como cada vez le fue agarrando gusto.
Ya eran casi las media noche y seguíamos platicando, para mi era interesante y a la vez preocupante escuchar sus historias que por mementos parecían sacadas de una novela. Era increíble la cantidad de cosas que esa chamaca ha hecho, desde ligarse a tipos en la calle, tríos, orgias, prostitución, tener un montón de novios y de todo hablaba casi con orgullo. Esa noche me entro un cargo de conciencia porque a pesar de todo lo que dice haber hecho, no deja de ser una chamaca y yo ya soy un hombre maduro. También por haber cogido sin condón con Julia sin saber todo de ella, pero si sabiendo que andaba con varios. Me prometí ya no volver a coger con ella y menos sin condón, pero no tarde mucho en romper esa promesa.
Al día siguiente Julia queria volver a pasar a la tienda en la noche pero le dije que no podía porque tenia un compromiso con mi esposa y como no dejaban de entrar clientes termino por irse. Al tercer día de nueva cuenta paso a la tienda y le volví a poner un pretexto, pero entonces me dijo que si le tenia miedo y le dije que no. Termine por decirle que mejor así dejáramos las cosas y que no se preocupara de lo que debía, que ya estaba saldado. Julia me pregunto que si entonces la estaba terminando y cuando le dije que si, ella me dijo que me daba una semana para pensarlo y que si cambiaba de opinión le avisara y se salió enojada.
No había pasado ni una semana y en verdad no dejaba de pensar en Julia y lo sabroso que coge, hasta me la jale algunas veces en el baño de la tienda solo recordando la cogida. Entonces un día paso a comprar cosas para su casa y la vi en con un pantalón ajustado y ombliguera, ver la piel de su delgada cintura y sus nalguitas con el pantalón ajustado me paro la verga. Ella no me dijo nada, pero antes de que se fuera le pregunte cuando podía pasar en la noche y se rio mientras me decía que al rato. Nuevamente espere cerrar la tienda con nerviosismo y pensando que a lo mejor no iba, pero si llego.
Ya sin temor, cachondo y conociendo un poco mas como era de caliente, en cuanto entro comencé a besarla y desnudarla por completo. La subí al mostrador, le comencé a chupar su pepita y por primera vez vi a detalle tan rica cosita. A pesar de todas su aventuras y lo mucho que supuestamente le ha dado uso, no deja de verse cerradita y con muy pocos pelos tan delgados que apenas se ven. Aunque cuando la abría completamente de piernas y usaba mi mano para separar los labios de su pepa, ya se notaba el uso que le ha dado. No podía dejar de disfrutar también de su culito que al parecer es lo único virgen que dice tener y clave mi cara entre sus nalgas para chupárselo. Mientras lo hacia Julia me dijo que ya sabia que no aguantaría sin decirle que fuera.
Ya había puesto cartones en el cuarto que uso como bodega y nos metimos ahí para hacer un 69 delicioso tirados en el piso sobre los cartones. Un poco después Julia me dijo que me acostara bien y ella se sentó sobre mi cara mirando hacia mis pies y comenzó a moverse embarrando su pepita por toda mi cara. Yo estaba bien cachondo y me la estaba jalando, entonces sentí que se quedo un poco quieta y cuando sentí comenzó mearse sobre mi cara. Francamente siempre había sido algo asqueroso pero estaba tan caliente que le seguí chupando su pepa y no aguante mas y me vine mientras ella todavía se estaba meando. Sentí su boca nuevamente en mi verga y realmente nunca se me bajo lo excitado aun después de venirme y seguimos haciendo un 69 por un rato mas.
Cuando la puse de perrito apunte mi verga a su pepa y se la deje ir con fuerza, justo como sabia que le gustaba y con la emoción le comencé a pegar con el puño cerrado en las nalgas y las piernas sin que ella me lo pidiera. Sus jadeos eran muy intensos y me decía que le pegara mas, creo que yo también estaba jadeando, pero era como ser otra persona al coger con julia. Poco después nos giramos para coger de frente y levante sus piernas para ponerlas en mis hombros y dejarle ir la verga con fuerza. Me pidió que le diera una cachetada y se la di con fuerza, lo que hizo que ella gimiera mas duro y me pidiera que le diera mas verga.
Cuando le avise que me venia me dijo que en su boca y corrí a ponerme sobre ella. El primer chorro salió tan fuerte que se fue por arriba de su cabeza hasta caer en el cartón. Julia recibió casi todo en su boca y chupo mi verga para sacarme todo lo que podía. Una vez que me vine por completo me tire en el cartón junto a ella y Julia volteaba como buscando algo. Le pregunte que pasaba y me dijo. “Esto” mientras con su mano recogía las gotas de mi leche que cayeron en el cartón y se las llevo a la boca. Era realmente una locura hacer todo esto con una chamaca de apenas 18 años.
Después de esa segunda cogida ya me valió madres y comencé a verme con Julia casi todos los días por las noches, solo los fines de semana que se va de fiesta no pasa. Tango 5 meses cogiendo con Julia y aunque a veces todavía me sorprende con las cosas que me platica que hizo, ya me acostumbre y hasta me termino excitando al escucharla. Con ella nunca se que esperar, pues me sale con cada loquera cuando cogemos que se me termina olvidando la diferencia de edades que tenemos. Lo único que aun no hace porque le duele demasiado es sexo anal, pero así como es de cachonda seguramente algún día lo hará conmigo o con alguien mas y espero seguir cogiendo con ella para entonces. Lo unico malo es que estoy conciente que tarde o temprano nos dejaremos de ver y siento que la voy a extrañar mucho.
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