Mi mujer se queda dormida despues de cojer toda la noche con 7 hombres
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Mi nombre es Luis y estoy escribiendo esto, porque no puedo dormir después de una noche loca, donde 7 hombres se cogieron a mi esposa frente a mi. Cuando escribo esto es sabado a las 5 de la mañana, acabamos de llegar a la casa, mi esposa Nubia está rendida y se quedó dormida apenas toco la cama. Estaba leyendo historias eróticas para agarrar sueño, mientras atrás de mi, está ella ya durmiendo. Se acostó bocabajo, aun con el minivestido rojo que uso esta noche, sin tanga porque alguien se la quedó y veo como le escurre semen de su panocha. Esos mecos que ella saca desde adentro, son míos porque fui el último en cogérmela, pero también es una mezcla del semen de los 7 amigos que se la cogieron. En realidad no conocíamos más que a uno de esos chicos, quien fue el que llevó a los otros chicos, pero a nosotros nos da igual, pues son solo vergas con patas.
Para mi es curioso que nunca me sentí tan enamorado, tampoco había tenido una relación de tanto tiempo, pues ya tenemos 8 años juntos. Pero al mismo tiempo, nunca había estado con una mujer que disfrutara tanto la promiscuidad como Nubia y menos que fuera tan descarada en admitirlo. Creo que eso es como una droga, que una vez que la pruebas, quieres mas y mas, hasta el punto que nada parece suficiente y pierdes todos los límites. Ninguno de los dos éramos unos angelitos y cuando nos confesamos nuestro conteo de parejas sexuales por primera vez, ambos estábamos muy parejos. Ahora mismo, ya no tenemos idea de cuantos machos han cogido con Nubia, cuantos han besado su boca, cuando han disfrutado entre sus piernas. Aunque eso, es algo que dejó de importarnos hace mucho, a mi, me sigue excitando saber que son cientos y estoy seguro que muy cerca de mil.
Aunque desde el inicio nos abrimos a tener una relación abierta, el proceso para llegar a donde estamos ahora no fue acelerado, pues los dos primero años, éramos muy quisquillosos. Selectivos con los hombres que se la cogian, muy estrictos en el uso del condón, incluso con los besos en la boca. También debo confesar que me daba pena que supieran que era cornudo o que la vieran vestida como puta, pero mucho mas pena que algún conocido se diera cuenta que Nubia cogía con otros hombres. Pero todo en esos años, era hipocresía de ambos lados, pero no con mala intención, tal vez porque ninguno queria que otro pensara mal o que alguno pensara que no nos importaba. Por ejemplo, muy rara vez, cuando algún hombre bien parecido queria penetrarla sin condón, ella me preguntaba. Casi siempre, mi respuesta era un, “Como tu quieras mi amor” y muy contadas veces, ella dijo sí, permitiendo que otro disfrutara su panocha piel con piel. Pero dentro de mi, me inundaba una excitación diferente en esas situaciones, era más intensa al ver a otro desahogarse dentro de ella.
Lo mismo pasaba cuando pasaron de ser trios conmigo a ser trios de ella con dos hombres. No me importaba solo ver, aunque podía participar, pero algo me excitaba de dejarla actuar sola mientras yo esperaba que terminara con ellos para entonces disfrutarla. Aun recuerdo un par de pláticas, donde Nubia me decía que coger con dos al mismo tiempo era su límite. Cuando comprábamos ropa sexy para los encuentros y elegía cosas que no la hicieran verse vulgar. O la supuesta preocupación que nos daba después de que cogia sin condon con alguien o cuando se llegaba a romper un condon. A lo mejor, todo eso no era falso, pero creo que ambos lo haciamos asi, por el otro. Yo pensando en que ella se sintiera cómoda, sin presiones de que hiciera algo que no le gustara o no quisiera. Lo mismo de ella hacia mi, tal vez pensando en que yo me sintiera seguro de ella y cómodo con las situaciones.
Poco a poco, fueron más hombres que la besaban en la boca, más hombres que entraban en ella sin condon y su ropa se fue haciendo más atrevida. Al mismo tiempo, nuestra emoción, nuestra excitación como pareja aumentaba, al igual que nuestra confianza el uno en el otro. Por primera vez, casi dos años después de comenzar nuestra relación, tuvimos una plática honesta y sin mascarás, donde nos confesamos las pocas que aún faltaban por hablar o se habían hablado pensando en el otro. Esa vez, cada uno hablo pensando en el mismo y le confesé lo mucho que me excitaba verla y sentirla llena de semen de otros. Ella me confeso que tambien se excitaba mas y que en realidad, ella podría estar con muchos al mismo tiempo. También me dijo lo mucho que le excitaba verse en un espejo y verse muy puta, ya sea por la ropa o por estar en la cama con otros. Al final, ambos nos confesamos que no lo habíamos dicho pensando en no lastimarnos, sin saber que nos excitaban las mismas cosas.
La realidad, es que esa platica tambien incluyo los riesgos de lo que haciamos o queríamos hacer. Estando muy conscientes, ambos decidimos compartir responsabilidad si algo malo pasaba. No existirían culpables, mucho menos reproches, pero queríamos vivir juntos, una vida intensa, sin limites para disfrutar juntos. A partir de ahí, desde el siguiente encuentro, vi a Nubia dejarse llevar completamente y la vi mas excitada que nunca. De la noche a la mañana era otra, mas caliente, mas vulgar, mas puta y valiendole madres todo lo que no fuera coger. El siguiente había sido un encuentro con un soltero, pero ella fue una auténtica perra con el, tanto que me hice a un lado para poder disfrutar mirándola. Aunque el ese chico quiso usar condón, por primera vez la vi pedirle a alguien que se viniera en su boca, vi como se los tragó y saboreo, como si fueran los míos. A pesar de que muchas veces la había visto con otros hombres, cuando ese tipo se fue, ella y yo cogimos como nunca, entregados a una pasión que no se puede describir.
Siguieron encuentros cada vez más locos y con más hombres, incluso con tipos que anteriormente hubiéramos descartado a la primera. Las cosas habían dado un salto enorme de un momento a otro, pero me gustaba lo que veía en Nubia. Pero ella también cambio en nuestra vida diaria y llevo el sexo a lo que antes era más privado, más de nosotros como pareja. No voy a negar, que eso fue inesperado y que al principio, me pareció que era demasiado, pero tambien me termino gustando. Ella invitó a un chico de los que ya conocía a una fiesta que nos invitaron como pareja. Le permitió manoseos discretos en la mesa, con personas que nos conocían muy cerca, bailó con él y hasta se perdió un rato con el cuando según fue al baño. Terminó la fiesta y nos fuimos los tres a un hotel, donde ella nos ordeño a los dos y al final lo invitó a quedarse a dormir en la casa. Fue la primera vez que otro hombre entraba a nuestra casa y aunque ella no me pregunto, me sobre excito que cogiera con él en nuestra cama.
Las cosas siguieron escalando lentamente, pero cada experiencia nueva era mas excitante para los dos. Como la primera vez que cogio con mas de dos hombres frente a mi. Fue con unos chicos que conocimos en un antro, aunque el plan era que se ligara a uno, terminó invitando a cuatro y nos la cogimos todos en un motel. Ya nos habíamos olvidado de los condones, si alguien se lo ponía, pues bien, pero si no usaba, para nosotros era mucho más excitante. Era y siempre será delicioso, ver como su panocha escurre el semen de otros y ella sabe lo mucho que me gusta verla asi. Y esa noche cuando nos la cogimos entre los cinco, ella misma les pedía a todos que se los echaran dentro. Al final, acercarme a mi esposa con su panocha llena de semen de diferentes hombres y meter mi verga en ella, fue una de las experiencias que mas me excito y mas voy a recordar toda mi vida. Aunque lo hemos hecho cientos de veces, esa primera vez, fue la más especial de todas.
Nubia no se guarda nada conmigo, es parte de lo que mas me encanta de ella, me dice quien le coquetea, quien le propone cosas, a quienes se quiere coger y a quienes se ha cogido sin que yo este con ella. También lentamente se volvió más atrevida al vestir, incluso puedo decir que le encanta lo mas descarado y vulgar. Aunque no siempre anda así, no para ir de compras o para ir a la escuela de nuestra hija, pero me encanta su ropa “decente” que deja ver de lo normal. Pero sobre todo la ropa como el vestido de hoy, rojo para llamar la atención, de tiras en la parte superior, solo con un poco de tela tapando sus pezones y más tiras por el costado de la cadera. Cualquiera que la vio de camino al club donde estuvimos, sabe que es una mujer buscando machos que se la cojan.
Hoy no fue una noche tan loca, pues 7 hombres ya no es nada para ella que ha estado hasta con 16 en la misma noche. Aunque lo más común, es que consigamos de 5 a 10 hombres en los clubs para coger con ella. Si es contactando de nuestro circulo de conocidos, la realidad es que son menos, porque no siempre coinciden en horarios y aunque queden de llegar, no siempre llegan. Para mi es la mujer perfecta, pues entre mas puta se vuelve, la amo mucho mas y la deseo con más fuerza. Creo que lo único que le falta para que pudiera decir que no existe otra como Nubia, es que le gustara el sexo anal. Pueden cogérsela todo lo que quieran por la panocha, incluso con dobles penetraciones, pero nada por su culito, que a penas unas pocas veces he probado en los 8 años juntos.
Yo estoy convencido, que no podría vivir con ninguna mujer que no fuera tan puta y cachonda como Nubia. Y es que, si eres cornudo sabes lo adictivo que es ver a tu mujer revolcarse con otros y que se porte como puta. En serio amigos, si quieren ser felices y olvidarse de problemas de pareja, consiganse una puta y sabrán lo que es la felicidad verdadera.
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