Me cogí a la esposa de mi primo por el culo y lactando mientras el estaba en el hospital

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Mi esposa se llama Gaby, es una mujer atractiva de 33 años, con enorme busto y piernas hermosas, yo me llamo Oscar y tengo 30 años, cuando la conocí hace unos 10 años, ella estaba casada con uno de mis primos, el cabrón era la envidia de los varones de la familia, pues a cada reunión o fiesta lo acompañaba y siempre se vestía muy sensual, ninguno podíamos quitar la vista de ella, incluso los que estaban ya casados, sin embargo Gaby parecía estar muy enamorada de mi primo Luis y nadie mas parecía tener alguna oportunidad de nada con ella.

La oportunidad se me dio a mi, cuando mi primo por andar de borracho tuvo un accidente, a solo unos pocos días de que tuvieron a su hijo, varios de la familia fuimos a verlo al hospital y Gaby estaba ahí con su bebe recién nacido en brazos, era increíble que aun con ropa deportiva se viera super sensual y aunque yo estaba ahí porque me preocupaba la salud de mi primo, no podía evitar admirar a su hermosa mujer. Por aquellas fechas yo recién había comprado mi primer coche, entonces cuando Gaby se despidió de mi primo para regresar a su casa, pues no podía quedarse con el por el bebe, yo me ofrecí a llevarla, la ironía de la vida es que mi primo me lo agradeció mucho antes de que me fuera a dejar a su esposa y su hijo.

Durante el trayecto solo platicamos del accidente de Luis y de que ella estaba muy molesta porque todo paso por su vicio del alcohol, mientras ella se desahogaba, yo de vez en cuando volteaba discretamente a ver sus de por si enormes tetas, pero con la lactancia, se habían puesto impresionantes, ella no se dio cuenta, pues según yo volteaba a ver a mi nuevo sobrino y cuando llegamos a su casa me invito a tomar un café y tuvimos una platica que se prolongo como 4 horas, estaba sorprendido de que además de ser hermosa era muy inteligente y ordenada, su casa estaba impecable, yo solo podía pensar en la suerte que tenia mi primo. Al despedirnos acordé pasar por ella para llevarla al hospital al día siguiente e intercambiamos números de teléfono.

Al día siguiente pase por ella y mi sobrino, los deje en el hospital después de pasar a saludar a Luis, les dije que yo pasaría por ella en dos horas mas para regresaría a su casa y así fue, se repitió la platica del día anterior, pero esta vez hablamos cosas mas personales, incluyendo un poco sobre su relación sexual, Gaby me confeso que se sentía un poco decepcionada porque Luis ya no era tan intenso como al inicio y me dijo que ella era una chica que fácilmente se excitaba, eso me hizo volar la imaginación, ¿Cómo seria en la cama? deje que siguiera la platica de esos temas y cuando pude le pregunte directamente, aunque no me quería decir, finalmente me dijo que desde chica le encantaba el sexo y parte de enamorarse de Luis había sido por eso, pues de novios era intenso, con fantasías que cumplían juntos y poco a poco se le había quitado, entonces, cuando estaba en la cama, pues decía que hacia cualquier cosa para complacer a su pareja, que ella siempre había soñado con estar al lado de un hombre que la hiciera vivir todo tipo de experiencias, pero que ya no podría ser así porque Luis había cambiado mucho desde que se casaron.

Toda esa platica me puso muy cachondo, el pendejo de mi primo tenia una mujer hermosa y con ganas de mucho sexo, no podía entender como pasaba eso en un matrimonio, entonces llevo a mi sobrino a su cuna porque ya se había dormido, la acompañe y me quede en la puerta de su recamara, cuando salía yo no me moví y ella se paro a pocos centímetros de mi, nos miramos y no aguante las ganas de besarla, la tome de la cintura y sentí sus enormes senos pegados a mi, no me rechazo, fue un beso que recuerdo como si hubiera sido ayer, su boca era suave y su aliento muy rico, lo primero que hice fue llevar mis manos mas arriba y acariciar sus grandes tetas, ella me dijo con voz muy sexy, -“No!… no lo hagas… te dije que me pongo cachonda muy fácilmente y debo guardar la cuarentena”, pero no dejaba de responder a cada uno de mis besos, la fui llevando sin dejar de besarla al mueble de la sala y la acosté en el, seguí besando su boca mientras la acariciaba de las tetas y su estomago, sentí que aun estaba fajada, tenia poco mas de una semana de haber dado a luz, pero yo estaba muy cachondo y ella también, fui bajando la mano hasta llegar a su panochita, ese día se había puesto un vestido un poco holgado, como si supiera lo que iba a pasar, no me fue difícil llegar a su piel, estaba completamente húmeda y mis dedos fácilmente hubieran entrado en ella pero no quería lastimarla y me contuve, pero mis besos los lleve a sus tetas, desabroche los 3 botones que tenia al frente su vestido y pude ver como sus senos estaban a punto de salirse de su bra, quite unos pequeños paños que estaba usando para no manchar su vestido con la leche y por primera vez pude ver sus grandes pezones, me pegue a uno de ellos como si fuera un bebé y comencé a succionarlo, la leche salía a chorros y la comencé a beber, era dulce y me gusto el sabor, ella se retorcía acostada aun en el sofá, me decía que siguiera, entonces continué mamando de sus tetas mientras la acariciaba de la panocha con una de mis manos, en algún momento me decía, -“como quisiera que me cogieras” y desde luego que yo también lo quería, poco después ella misma me dijo que me la quería chupar, y me pare junto a su cabeza, ella se acomodo en el sofá para alcanzar mi verga con su boca y me la comenzó a chupar mientras con una de sus manos se masturbaba, solo me la chupo unos minutos y me dijo, -“Cógeme por el culo… pero despacito”, entonces se acomodo en el sofá empinada contra el respaldo, me puse saliva y le escupí el ano, le puse mi verga justo en la entrada y se la comencé a empujar poco a poco, tenia miedo de lastimarla pero lentamente le fue entrando toda, le preguntaba a cada rato si estaba bien, ella me decía que si, aun así, me la cogí muy suavemente por el culo hasta que sentí que me venia y entonces se la saque del ano, ella me sorprendió cuando me pidió, -“En mi boca… dámela en mi boca.” Y apenas alcance a llegar a su boca para vaciarme en ella al mismo tiempo que me la succionaba con fuerza, Gaby no dejo escapar ni una sola gota, se lo trago todo y cuando termino de sacar lo poco que restaba, se limpio los labios como si se hubiera acabado de comer un helado o un postre, me miro levantando la cara para que la besara y me dijo, -“que rico”, esa noche tenia que trabajar y me tuve que ir, el sofá había quedado empapado con tanta leche que cayo sobre el mientras me la cogía, después me dijo que le encantaba que me tomara su leche porque se le hacia bien cachondo, pero que a mi primo no le gustaba, así que le di gusto mientras estuvo dando de lactar.

A partir de ese día durante el tiempo que estuvo mi primo en el hospital que fueron dos semanas, me la cogí en su casa todos los días, siempre por el culo para respetar su cuarentena, inclusive dos veces me quede a dormir con ella y cuando mi primo salió, nos seguimos viendo casi todos los días aprovechando que mi primo trabajaba de día y yo en esas fechas trabajaba en un antro durante la noche, duramos cogiendo a escondidas dos años, durante ese tiempo fuimos descubriendo los gustos de cada uno y fuimos haciendo realidad algunas fantasías, ella quería hacer un trío con una mujer y lo hicimos con una amiga mía, después hicimos otro con uno de mis amigos, pero eso solo fue el inicio de nuestra relación, con el tiempo hicimos muchas otras cosas, pero un buen día, otro primo, el hermano de Luis nos atrapo entrando a un motel, le contó todo a Luis y ella lo dejo, agarro sus cosas y al bebé para irse a vivir conmigo a una casita que rente cuando todo el lío se armo, durante muchos años algunos de mi familia no me hablaron pero me valía madres, Gaby es una mujer por la que vale la pena hacer cualquier cosa, ya pasaron 8 años y tenemos otro hijo que ese si es mío, de todas formas los quiero por igual porque los dos son de la mujer de la que me enamore y aun amo con locura, nos casamos apenas hace 3 años porque Luis no quería darle el divorcio, pero al fin lo hizo, en lo sexual nos llevamos de maravilla, Gaby es ardiente y siempre tiene ganas de coger, aun hacemos muchas fantasías que nos van saliendo, aunque en realidad no nos consideramos swinger, de vez en cuando invitamos a alguien, hombre o mujer para hacer algo rico y diferente, ninguno de los dos se cansa de coger y hacer una que otra locura, ella tiene todo mi permiso de coger por su cuenta si así lo quiere, pero dice que sin mi, no le sabe igual y prefiere no hacerlo, igualmente me ha dado su permiso para coger con alguna chica, pero opino igual que ella, sin Gaby no es lo mismo, así que prefiero guardar mis energías para coger con mi mujer.

Espero no haber aburrido a nadie, simplemente quería compartir la dicha que tengo con la mujer que amo a pesar de que muchos nos juzgan de ser malas personas por que le quite la esposa y su hijo a mi primo, pero que le hacemos, nos enamoramos y listo.

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